Preocupación por los reparos de Costas a 40 concesiones de chiringuitos de la provincia de Málaga

Nuevo capítulo en el tedioso proceso de regulación de los chiringuitos andaluces. Cuando todo parecía que estaba encarrilado, vuelve la preocupación a unos profesionales que además se encuentran inmersos en una temporada alta que consideran clave para sobrevivir resolver y es un proceso que las administraciones tienen que darse cuenta de que no se puede seguir así. Los chiringuitos tenemos que estar a la altura de lo que nos piden los turistas. Tenemos que renovarnos y hacer nuestra obras y ponernos al día. Todo ello tiene que ser con una seguridad jurídica«, declara, para apuntar que sólo en la Costa del Sol hay prevista una inversión de 320 millones de euros y en Andalucía seguro que estamos cerca de los mil millones. »Los chiringuitos son una seña de identidad, llevamos ahí toda la vida, somos necesarios y tienen que pensar en que vivimos del turismo, que tras el impacto de la pandemia. Las discrepancias surgidas en Costas respecto a algunas concesiones realizadas por la Junta, cuarenta de ellas en el litoral malagueño, han generado temores en los profesionales que buscan con este proceso la seguridad jurídica necesaria para acometer mejoras en los chiringuitos una vez que los expedientes reciben el visto bueno de las administraciones. El presidente de la Federación de Empresarios de Playas de Andalucía y de la Asociación de la Costa del Sol, Manuel Villafaina, reconoce que el desencuentro entre la Dirección de Costas y la Junta provoca incertidumbres, si bien se muestra confiado en que ambas partes
llegarán a un acuerdo. De hecho asegura que ya se han mantenido los primeros contactos para solventar un problema que surge por el conflicto jurídico que se ha suscitado entre la Junta de Andalucía y el Gobierno central respecto a las concesiones para chiringuitos aprobadas en los últimos meses. Villafaina explica que la Dirección General de Costas, del Ministerio para la Transición Ecológica, ha puesto reparos a algunas de las concesiones otorgadas por la Consejería de Agricultura, Pesca, Ganadería y Desarrollo Sostenible, por lo que se ha provocado una situación de incertidumbre jurídica para estos empresarios. Además, precisa que algunos de los establecimientos afectados ya habían, incluso, iniciado obras de mejora del chiringuito. «Necesitamos contar ya con una seguridad legal que nos permita acometer estas actuaciones en nuestras instalaciones sin sobresaltos», afirma Villafaina, que antes de que surgiera este contratiempo destacaba, tras ser elegido presidente de la Federación Andaluza de Empresarios de Playas, que el principal reto era el de terminar el proceso de regularización de los chiringuitos para lograr esa seguridad jurídica que necesita el sector. «Que todos los expedientes pendientes se terminen. Nos quedan un 35% por resolver y es un proceso que las administraciones tienen que darse cuenta de que no se puede seguir así. Los chiringuitos tenemos que estar a la altura de lo que nos piden los turistas. Tenemos que renovarnos y hacer nuestra obras y ponernos al día. Todo ello tiene que ser con una seguridad jurídica«, declara, para apuntar que sólo en la Costa del Sol hay prevista una inversión de 320 millones de euros y en Andalucía seguro que estamos cerca de los mil millones. »Los chiringuitos son una seña de identidad, llevamos ahí toda la vida, somos necesarios y tienen que pensar en que vivimos del turismo, quees la industria más grande que tiene España, y, por tanto, creo que nos tendrían que cuidar y saber que estamos ahí y que no podemos seguir en esta situación porque luego vendrán los males. Que las pegas se las pongan a los nuevos, pero no a los que llevamos ahí toda la vida«, expone.
Un conflicto que se produce cuando el cien por cien de los chiringuitos están operativos, con todos los trabajadores fuera de los ERTE e incluso comenzando a contar con parte de los fijos discontinuos. «Somos unos 1.100 negocios en toda Andalucía a los que se suman otros 4.000 o 5.000 autónomos de las hamacas y zonas de ocio y náuticas. Estos negocios están empleando a más de 40.000 personas en Andalucía, y unos 25.000 en la Costa del Sol. Sabemos que la facturación va a ser mucho menor que antes de la pandemia. El año pasado fue un 70% inferior y este verano esperamos que sea el 50% de lo vendido en 2019«, precisa, para insistir en que en lo que va de temporada »se nota que hay ganas de salir y de gastar. Se nota el tirón del turismo nacional, pero también se deja sentir la llegada de holandeses, belgas y hasta algunos británicos que no tienen problema para guardar cuarentena a la vuelta«.
Precisamente, días atrás, la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, resaltaba la importancia de los chiringuitos para la economía de Andalucía, haciendo hincapié en el papel como «establecimientos estrella del verano».

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