EL GOBIERNO ULTIMA UNA SOLUCION AL CONFLICTO DE LOS CHIRINGUITOS

01-02-2012 – El secretario de Estado de Medio Ambiente prevé anunciarlo el viernes en Torremolinos
«Estoy a favor de los chiringuitos, del sentido común y de la sensatez». Estas palabras las pronunció Mariano Rajoy durante su intervención en el Foro ABC que se celebró en julio de 2009 en Málaga. Una declaración de intenciones que hacía pública después del conflicto entre el sector y Costas -con amenaza de derribos masivos a lo largo del litoral andaluz incluida- y que se cristalizará a finales de esta semana con el anuncio por parte del Gobierno de una solución definitiva a esta problemática.

Según ha podido saber este periódico de fuentes del Ejecutivo, el secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, realizará este viernes una visita a la provincia de Málaga en la que anunciaría una serie de medidas con las que el Gobierno regularía la situación de estos negocios.El lugar elegido es el municipio de Torremolinos, que acoge algunos de los chiringuitos más señeros de la Costa del Sol, y se espera la presencia de miembros del PP andaluz, así como de otros dirigentes del partido en altas instancias.

Los populares realizan este movimiento a escasos dos meses de las elecciones andaluzas y con esta escenificación dejan en evidencia la gestión del PSOE y la Junta de Andalucía sobre este conflicto. Una cuestión que melló la imagen del partido y que se trató de solucionar con el traspaso de las competencias a la consejería de Medio Ambiente, pero que no ha conseguido restar las críticas de los «chiringuiteros» y su queja crónica de que no se solucionaba su indefensión. El acuerdo dependería de un cambio de la actual Ley de Costas, que data de 1988, y que aplica la Junta desde que el año pasado se acordara la transferencia de la gestión del litoral.

El sector, que reclamaba desde hacía años este paso, acogió con ilusión en el verano de 2009 el anuncio del presidente andaluz, José Antonio Griñán, del compromiso alcanzado con Rodríguez Zapatero. Aunque el proceso se dilató en demasía y los enfrentamientos con la Demarcación de Costas por los expedientes sancionadores no cesaban. El esperado momento se produjo el 1 de abril del pasado año. La Junta de Andalucía asumía las funciones, medios y servicios en materia de ordenación y gestión del litoral andaluz, previsto en el Estatuto de Andalucía, y que fue formalizado meses antes por el entonces ministro de Política Territorial y Administración Pública, Manuel Chaves, y la consejera de Presidencia, Mar Moreno. Pero lo que parecía una solución a un conflicto que en 1987 ya provocó la movilización del sector, fue entendida por los empresarios como una forma de taparles la boca, como denunció el presidente de la Federación de Asociaciones de Empresarios de Playas, Norberto del Castillo.

 

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