Costas quiere acabar con las terrazas y los puestos de espetos de los chiringuitos
Los chiringuitos malagueños siguen estando en el punto de mira. Según ha informado este miércoles la concejal de Servicios Operativos, Playas y Parques y Jardines del Ayuntamiento de Málaga, Teresa Porras, la Demarcación de Costas no quiere tener en la playa las instalaciones donde se cocinan los famosos espetos ni tampoco las terrazas anexas a los chiringuitos.
Porras explicó que de esta forma se están poniendo en peligro los espetos, es decir, los conjuntos de sardinas ensartadas en cañas y cocinadas a la lumbre en antiguas barcas de madera, que normalmente se sitúan en plataformas junto a los chiringuitos.
El motivo es que la Demarcación de Costas ha remitido un escrito al Ayuntamiento explicando que las instalaciones con pérgolas anexas a los chiringuitos donde se elaboran los espetos "deberán desmontarse" en un plazo fijado por la Demarcación.
"No se permite la ejecución de pavimentos rígidos sobre la arena, las barras o cierres laterales entre postes y otros elementos ajenos a dicha instalación, acopios de cajas, enseres o leña en el entorno de estas instalaciones", señala el escrito remitido por Costas.
"Esto significa que habría que demoler la parte de hormigón que se construyó en los chiringuitos hace cuatro años para hacer los espetos y se hizo porque era más limpio hacerlo ahí que en la arena", comentó la concejal, quien recordó que la Demarcación estuvo de acuerdo en su día con la creación de estas instalaciones.
Además, en el escrito remitido al Ayuntamiento se refleja que "no se autorizan la ocupación y el montaje de los elementos anexos a la instalación concesional", lo que implica que los empresarios que pongan terrazas junto a la arena podrán ser sancionados.
En el documento también se explica que establecimientos como los de La Caleta, que no cuentan con concesión, no pueden superar los 20 metros cuadrados y "deberán proceder a su desmontaje" una vez que finalice el verano.
"Eso no se puede hacer porque son kioscos que están construidos y habría que demolerlos", señaló la edil.
Por todo esto, Porras señaló que ya ha enviado una alegación a este documento en el que también añade que el Ayuntamiento no va a hacerse responsable de la eliminación de esas instalaciones no autorizadas.
"Si quieren, que los quiten ellos porque yo no voy a ser policía de nadie y tampoco voy a poner las sanciones", comentó la concejal de Playas.
"Creemos que hay algo raro en todo esto que no quieren decir, algo como que quieren llevarse el turismo a otro lado", destacó Porras, refiriéndose a la importancia de las terrazas y los espetos en la provincia malagueña, ya que se han convertido en un referente para los turistas en verano.
La edil también indicó que recibió el escrito de Costas a principios del mes de mayo pero no lo dio a conocer por "lealtad", pero que tras el rechazo del Gobierno a la propuesta del PP en el Congreso de los Diputados para renovar las concesiones de los chiringuitos se ha decidido a hacerlo público.
"Han aprobado crear una mesa de coordinación de la que se está hablando desde hace tiempo pero que no se ha hecho aún, por lo que está claro que lo único que quieren es dilatar las cosas", recalcó