Costas encarga un estudio para recuperar las playas de Marbella

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Sale a concurso por 200.000 euros el proyecto para buscar soluciones a la pérdida de arena en el casco urbano.

Vista de la playa de La Fontanilla, una de las que sufre más pérdidas de arena.

La burocracia ya está en marcha, para alegría del sector turístico y del Ayuntamiento de Marbella, uno de los principales defensores de la necesidad de dar una solución definitiva al eterno problema de falta de arena en las playas del casco urbano de Marbella. El Gobierno central sacó ayer a concurso la anunciada redacción de un proyecto para estabilizar y remodelar el borde litoral entre la playa de Nagüeles, a la altura del espigón del hotel Marbella Club, y el puerto de Marina-La Bajadilla, los tramos que más sufren el azote de los temporales y que año tras años protagonizan un trasiego de camiones cargados de arena para intentar salvar los muebles en temporada alta.

«Algunas playas están experimentando un claro retroceso debido al fenómeno de la erosión costera, lo que hace necesario acondicionar el frente litoral existente», apuntaron ayer desde el Ministerio de Medio Ambiente. El estudio, presupuestado en 205.000 euros, pondrá sobre la mesa las medidas para rehabilitar la costa en las zonas donde se está produciendo este retroceso y las alternativas para preservar la superficie en las que aún tiene buena cara.

No es la única línea de actuación. Otros objetivos serán fijar un protocolo para los trasvases de arena periódicos desde los puertos de La Bajadilla y Deportivo y recuperar la servidumbre de tránsito y de protección donde sea posible. «Todo lo que se pueda incorporar pasará a tener mayor protección», explicó ayer a este periódico Francisco Javier Hermoso, jefe de Costas en Málaga.

Todo quedará plasmado sobre el papel. La empresa que se haga con el contrato de asistencia técnica tendrá hasta 18 meses para poner negro sobre blanco las actuaciones para que el litoral luzca su mejor cara. El plazo para presentar las ofertas concluye el 1 de febrero. La tramitación será compleja pero ya se vislumbra el principio de fin para el problema de las playas de Marbella.

A punto está también de salir a concurso, por la misma cuantía, un estudio idéntico para San Pedro Alcántara, que cada año da quebraderos de cabeza tanto al Ayuntamiento como a Costas por la estrechez de sus playas y sobre todo por la abundante presencia de piedras que quedan al descubierto cuando la arena se esfuma. Los dos proyectos irán de la mano para dar una solución conjunta a los puntos flacos de la costa.

Con escolleras

«Nos hubiera gustado que salieran a concurso público los dos a la vez pero ahora lo importante es que el proyecto esté listo y se ejecute cuanto antes; que se le ponga una partida presupuestaria», valoró ayer el concejal de Playas, Antonio Espada, que recordó la insistencia del equipo de gobierno para que la contratación del estudio no se guardara en un cajón. El Ayuntamiento siempre ha apostado por la instalación de escolleras para frenar la fuerza de los temporales, que se lleva la arena de las playas y la acaba devolviendo a las bocanas de los puertos o a la playa del Cable, que siempre anda más holgada que las demás.

Es una de tantas. Otras salidas pueden pasar por los diques sumergidos, los espigones o por las aportaciones programadas de arena, que no estén marcadas como ahora por la urgencia ante la llegada de los bañistas, e incluso por la combinación de varias de estas medidas. La última palabra la tendrán los técnicos. «Hay que estudiar qué opción es mejor en cada caso, porque San Pedro Alcántara tiene unas características propias», subrayó el jefe de Costas en Málaga. De momento, considera básico que se establezca un protocolo para que el material que se extraiga del dragado de las bocanas de los puertos se destine siempre a las playas del centro. Este año el destino fue San Pedro, donde apenas quedaba hueco en su extremo más oriental para colocar las hamacas de los chiringuitos de la zona. Algunos empresarios incluso optaron por contratar camiones con material para salvar la temporada como medida desesperada.