Cómo es una playa libre de coronavirus: dos metros entre sombrillas y aforos limitados.
La Junta de Andalucía ve “muy probable” reabrir las playas a final de junio y los alcaldes trabajan para una temporada más corta y con más restricciones pero con veraneantes. Almuñécar, en la Costa Tropical de Granada, se ofrece como destino “piloto” en la desescalada de Covid en turismo. Su ayuntamiento da un paso al frente. Ha abierto las conversaciones con los sectores implicados en la próxima temporada, hoteles, alojamientos turísticos, campings, chiringuitos, bares, restaurantes, centros de náutica y buceo… Buscan alternativas y creen que están preparados para convertirse en “playa libre de Covid” por el tipo de destino, familiar, de pocas aglomeraciones, de calas pequeñas con acceso difícil. Nada que ver con el modelo multitudinario de otros destinos costeros.
Es uno de los municipios costeros andaluces que se moviliza después de que la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, echara un jarro de agua sobre el sector turístico español posponiendo a 2021 la apertura de establecimientos relacionados con el ocio. Un escenario que la Junta calcula que costaría 140.000 empleos y 15.000 millones de euros al PIB andaluz.
¿Se abren o no las playas? En los pueblos costeros trabajan con el horizonte de que se abrirá la temporada a mediados de junio a la espera de noticias. “Trabajamos pensando en que las playas se van a abrir el 15 de junio y seremos un destino ‘Covid Free’. Tendremos que garantizar que seremos un destino seguro, tomaremos todas las medidas higiénico sanitarias que marque el Ministerio de Sanidad y la comunidad. Haremos test a todos los trabajadores del sector e proponemos higienizar las habitaciones de los hoteles con ozono. Tomaremos cualquier medida necesaria”, señala el concejal de playas, Daniel Barbero.
“No somos un destino de aglomeraciones. Tenemos el espacio suficiente. Estamos entre los tres municipios de la provincia que mejor hemos cumplido el confinamiento. La gente está muy mentalizada y eso puede ayudar mucho a que podamos reabrir las playas. La gente sabe que este verano es distinto y todo el mundo seguro que va a colaborar. Tenemos 26 kilómetros de playa con muchas calas y donde las distancias siempre son grandes. Tomaremos medidas siempre dentro de la lógica porque eso de las mamparas que ha propuesto Italia aquí es una auténtica locura. Las playas son espacios abiertos y en verano hay una humedad y una temperatura que según las autoridades sanitarias hacen que el ‘bicho’ tenga baja incidencia”, agrega este responsable municipal.
En esta zona por ejemplo hay dos playas donde se practica ya el aforo limitado. Se hace de forma indirecta pero las de El Cañuelo, en Málaga, y Cantarriján, en Granada, limítrofes ambas. Son espacios protegidos donde el acceso sólo puede hacerse en un autobús de la Junta de Andalucía. Los vehículos se quedan arriba y se debe utilizar transporte público. Cuando el aparcamiento se agota, el autobús deja de bajar gente. Es una forma de autorregular la presencia de público. “Son medidas viables”, señala el concejal de Almuñécar. Lo controla la Delegación de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía.
La Junta lo ve “muy probable”
El vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín (Cs), que tiene las competencias de turismo, aseguró que es “muy probable” que las playas andaluzas estén listas este verano aunque su Gobierno no tiene aún información al respecto. “Ojalá pero no tenemos una bolita de cristal, no somos adivinos”, sostuvo Marín a preguntas de este periódico. Andalucía, con sus datos sanitarios, defiende que está entre las cinco comunidades con un mejor comportamiento de la pandemia y pide iniciar la desescalada que diseñará el Gobierno. “Lo racional es que es muy probable que este verano podamos ir a las playas. ¿En qué condiciones? Habrá que verlo según evolucione la pandemia”.
En su mano está enviar medidas para convencer al Ejecutivo central de que haya temporada de verano. En la propuesta de la Junta hay una contradicción. Elabora un mapa por comarcas, pide que Andalucía esté entre las primeras en superar el estado de alarma pero además, insistió Marín, no creen posible que se pueda prohibir la libre circulación de personas entre territorios. Buena parte de que las playas andaluzas se llenen depende de que lleguen veraneantes de otros puntos de España. Muchos madrileños tienen en la comunidad su segunda residencia. “He visto por ahí imágenes de ciencia ficción que no me atrevería ni a reproducir”, dice Marín refiriéndose a esa imagen de playas compartimentadas por pantallas de plexiglás.
Limitar aforos
El presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, también confió en reabrir chiringuitos y bares con limitaciones en el aforo. Reserva previa obligatoria, mesas a más de dos metros de distancia, prioridad a los veladores, limitación de comensales en cada grupo, vajilla desechable… el sector empieza a poner sobre la mesa sus propuestas.
Manuel Villafaina es presidente de la Asociación de Empresarios de Playas de la Costa del Sol, que agrupa a 457 chiringuitos de la provincia de Málaga, la mitad de los que hay en toda Andalucía. Villafaina lamenta el “alarmismo innecesario provocado por la ministra de Trabajo al decir que la restauración no abriría hasta finales de año”. “No creo que sea adivina. Queremos trabajar y mantener nuestros empleos”. El 30% de los ingresos anuales ya están perdidos: se concentran en Semana Santa y el puente de mayo. Confía en la juventud, en los curados del Covid-19 y no solo en la clientela nacional, sino en la internacional. “Hay muchas familias que si no viven de los cuatro meses de verano directamente pasarán hambre. Lo que haya que hacer lo haremos, pero no nos vamos a quedar sin playa este verano”.
urismo Costa del Sol no da por perdida la temporada. El organismo de la Diputación Provincial de Málaga, que agrupa el destino líder turístico andaluz, ya ha celebrado un par de reuniones del comité de expertos y con todos los alcaldes de los principales municipios turísticos. “Urgimos al Gobierno a coordinar y liderar una estrategia de reactivación del sector y a informar de las medidas preventivas que pretende tomar, para que los empresarios puedan acometer transformación de sus locales, hoteles, restaurantes y procesos. También a habilitar un plan de ayudas y de financiación extraordinario a la altura de la gravedad de la crisis”.
“Nos alineamos con chiringuitos, que piden que no se cobre este año el canon de ocupación de playas del Ministerio de Transición Ecológica (Costas)”
La Costa del Sol considera que parte con cierta ventaja por el turismo residencial, por sus comunicaciones “y porque no depende exclusivamente de las aerolíneas, pero seguimos básicamente a la espera de que el Gobierno sea claro”. Añaden en Turismo Costa del Sol: “Nos alineamos con chiringuitos, que piden que no se cobre este año el canon de ocupación de playas del Ministerio de Transición Ecológica (Costas). Esperamos que la ministra rompa su silencio”.
Torremolinos es uno de los destinos más emblemáticos de España. Su alcalde, José Ortiz, cree que existe una oferta renovada de playas para este verano y que está “en las mejores condiciones” para afrontar la crisis. Desde hace un mes una comisión estudia posible salidas a la crisis. “Queremos ser una ciudad Covid-free, que esto solo sea una pequeña perturbación”.
La alcaldesa de Fuengirola, Ana Mula, está pendiente de lo que determine el Gobierno o la Junta de Andalucía, al igual que indican fuentes del Ayuntamiento de Estepona consultadas por este diario. “No es lo mismo tener medidas de control en un municipio con tres calitas que en playas anchas de siete kilómetros como las nuestras”.
El alcalde de Benalmádena, Víctor Navas, señala que los ayuntamientos no pueden tomar medidas de modo “unilateral”. “Soy optimista”, declaró, “en que de aquí al verano la situación cambie diametralmente. Las cifras van en descenso, pero es verdad que no tenemos certezas de lo que pasará”. Este municipio cuenta con 9 kilómetros de costa y unos 20 chiringuitos.
Servicios contratados
Ayuntamientos como el de Cádiz trabajan como si la temporada de playa siguiera su curso. Desde el consistorio que gobierna José María González ‘Kichi’ comunican que la empresa municipal de playas ha rechazado un ERTE para su personal y aplazará el inicio de la temporada. Salvamento y socorrismo, limpieza… “se replantearán los trabajos para que se conserve el total de empleos”. La pretemporada debió empezar el 5 de abril. Se esperan instrucciones del Gobierno.
El alcalde de Rota (Cádiz), Javier Ruiz, también confía en que la pandemia siga evolucionando de forma positiva y se levante el confinamiento en verano. Las playas de su municipio son lugar fijo de muchos segundos residentes de provincias andaluzas, en un ambiente familiar, playas llenas, donde nadie imagina cómo fijar ‘numerus clausus’ para disfrutar las vacaciones. ¿Por pares e impares en los domicilios, por apellidos? Propuestas que son ya carne de muchos ‘memes’. “Supongo que a la playa y los parques se podrá ir. Otra cosa es el aforo en bares o en conciertos. Limitar el aforo en la playa lo veo inviable ahora mismo”, considera el alcalde, que sólo opina, aclara, porque las instrucciones vendrán de las autoridades sanitarias.
Distancias de seguridad
Ya estas últimas semanas de buen tiempo han existido problemas en algunos municipios costeros con quienes se saltaban el confinamiento para pasear o hacer deporte en las playas. Otros alcaldes de municipios como Vejer o San Roque también esperan instrucciones precisas. “Estamos a la espera de noticias de la Junta y del Ministerio. La suspensión de los plazos administrativos va a afectar a la fecha de su apertura porque hay que licitar los servicios”, señala Manuel Flor (PP), que tiene bajo sus competencias los servicios de playas como Los Caños o La Muela. “Según nos comentan, respetando la distancia de seguridad puede ser posible pero aún no tenemos información y, la verdad, ya deberíamos tenerla para trabajar en un sentido u otro”, subraya este alcalde.
En San Roque, municipio costero gaditano al que pertenecen, entre otras, las playas de la urbanización de Sotogrande, varía poco el panorama. Su alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, también desconoce cómo va a ser esa “nueva normalidad”. “Las playas son lugares de esparcimiento donde tendremos que controlar las aglomeraciones y que no haya actividades masificadas. Según como sea la desescalada valoraremos cómo hacerlo. Espero que permitan algún tipo de temporada, aunque sea con restricciones”, señala.
En Huelva, los ayuntamientos de Almonte o Lepe aún no han abordado cómo podrían ser las playas con coronavirus aunque esta semana comenzarán en ambos municipios, explican desde sus consistorios, a valorar propuestas. Desde el Gobierno de la nación, el Ministerio de Industria, que tiene las competencias en turismo, asegura que desde hace dos años se reúne de forma periódica las conferencias sectoriales, que sientan a las comunidades, y el Consejo Español de Turismo. “En este mes están teniendo carácter extraordinario. Se han reunido varias veces”, aseguran. A los municipios la información no llega.